top of page

España ante el equilibrio entre renovables y conservación

Sin duda, España es un país privilegiado para el aprovechamiento de las energías renovables. Hace poco, Elon Musk resaltó, a través de X, este potencial diciendo que:  España debería construir un parque solar gigantesco, podría abastecer a toda Europa.


Sin quitar la razón al magnate respecto al potencial del país respecto a las renovables, es crucial una planificación cuidadosa dado que este desafío implica no solo maximizar la eficiencia de la energía solar, sino también asegurar la protección de los hábitats y paisajes naturales.




Al abordar la transición hacia las energías renovables, debemos ser conscientes de que, aunque son fuentes limpias, su implementación no está exenta de impactos. La construcción de grandes infraestructuras, como parques eólicos o solares, requiere una planificación cuidadosa para mitigar su impacto en el medio ambiente. Estas instalaciones, a pesar de ser beneficiosas para reducir las emisiones de carbono, pueden afectar seriamente los ecosistemas y paisajes locales, por lo que es vital equilibrar el avance tecnológico con la conservación del entorno natural.


Precisamente un informe elaborado por el instituto internacional de derecho y medioambiente (IIDMA) señala la necesidad de una planificación territorial minuciosa y una participación pública activa en el proceso de transición energética. Esta transformación, enfocada en las renovables, requiere una consideración equilibrada de los impactos ambientales y la preservación del entorno natural. En regiones como Galicia, Asturias y las Islas Canarias, el enfoque ha sido adaptar la transición a las características territoriales específicas y no al revés, un ejemplo de cómo la diversidad geográfica debe influir en las estrategias de sostenibilidad.



Por ello, es fundamental apostar por un desarrollo de energías renovables que respete la integridad de los ecosistemas. La transición hacia las energías renovables en España, y en otros lugares, debe ser una sinergia entre el progreso tecnológico y la conservación del medio ambiente. La captura de carbono y otras tecnologías emergentes pueden ser parte de la solución, pero no deben desviar la atención de la necesidad de un cambio más profundo hacia fuentes de energía limpias y renovables.


La transformación energética de España es un reflejo de un desafío global: encontrar el equilibrio entre el avance tecnológico y la protección de nuestro planeta. La COP28, a pesar de sus limitaciones, ha destacado la urgencia de esta tarea poniendo como objetivo el triplicar la producción mundial de energías renovables para 2030.


En KISS the Planet, seguimos comprometidos con la promoción de un futuro donde la sostenibilidad y la tecnología van de la mano, respetando y protegiendo la riqueza de nuestros ecosistemas y paisajes.

bottom of page